El ejército
Esto es un asco.
Viajamos ayer a Beer-Sheva, la ciudad de sur en la cual vivimos hasta hace nueve meses. El autobús se llenó de soldados, muchos de ellos reservistas que habían recibido la cédula 8 de reclutamiento y se dirigían a sus bases. No es raro ver soldados en Israel, y en sus medios de transporte, todo lo contrario, su presencia es asfixiante, en cualquier época del año, haya guerra o no. Israel se parece a una historieta de Grondona White que publicó la revista "Humo(r)" allá por 1980: una Argentina utópica al revés, en la cual la condición natural era ser militar. Chicas y chicos visten el uniforme como su fuesen estrellas de rock, sus fusiles sos sus Fenders.
El ejército es la madre y el padre de la sociedad israelí. Genera sus hormonas y las mantiene alerta. Es el modelador central de sus conductas. El motor de cada movimiento individual y colectivo, y su propio combustible. Promueve la música joven y lanza a la fama estrellas. Amasa y hornea a sus políticos. Confiere legitimidad a quien pasa por sus filas. Margina y anatematiza a quien no haya sido soldado. Un padre que pierde a su hijo durante un operativo militar gana prestigio y es respetado.
¿Qué se puede pedir de una sociedad cementada alrededor de su tronco, el Tsahal (Ejército de Defensa Nacional)? ¿De una sociedad cuya droga y alimento es la existencia de un enemigo permanente? ¿De una sociedad discapacitada para el pensamiento crítico?¿De un país en dónde el arte disidente no existe?
3.
El primer ministro Olmert ha dado hoy un discurso ante la Kneset que es para temblar: no habrá alto del fuego, se intensificarán los ataques, nos caerán misiles y cohetes, debemos prepararnos para "sangre, dolor y lágrimas." Se va a profundizar la "limpieza" del sur del Líbano: se les dio 24 horas a los habitantes de las aldeas para que abandonen sus viviendas. A los que se queden, los van a matar. Dijeron, vamos a matar a los del Hizbollah, y también vamos a matar a sus simpatizantes. Y a aquellos que potencialmente puedan tener afinidad con los "terroristas", también.
A los israelíes esto los pones de pie. Que podría ser un pie en su propia tumba.